¿Siempre quisiste saber cómo combinar vino con tus platos gastronómicos?
Aquí te brindamos tips para que des tus primeros pasos en esta gran experiencia de vinos y maridaje.
Para empezar, es muy importante recalcar la importancia del tipo de cocción para los alimentos que queramos acompañar con nuestros vinos preferidos y entender que debe ser una combinación perfecta.
Los vinos con mayor peso son los tintos más nuevos, seguido los de crianza, luego reserva y por último gran reserva.
Hay un montón de tipos de sabores de comidas, pero no te preocupes que vamos a empezar por el principio, como debe de ser, debemos lograr determinar los sabores más básicos como son el salado, ácido, dulce, amargo, graso y picante. Como mencionábamos más arriba, el tipo de cocción de alimentos es importante, ya que no es lo mismo una combinación de vino rosa y pescado a la pancha que un vino rosa combinado con guiso frito de pescado, no tanto en los ingredientes que contiene, sino en la forma en la que se cocina. Lo ideal es siempre encontrar un equilibrio, las similitudes pueden ayudar pero los opuestos también se atraen, debemos de tener cuidado con suprimir las cualidades del plato que vamos a estar combinando.
El clima también puede influir en la elección del vino, cuando hace calor lo más atrayente sería un vino blanco fresco y frutado, sin embargo cuando hace frío sería más tentador un vino tinto robusto o un blanco con carácter.
Lo ideal serían vinos blancos ligeros, un champagne que no sea muy dulce y sea más neutro.
Bueno, los vinos rosados son súper versátiles y podés combinarlos con picadas, carnes blancas, frutos del mar y pescados.
Llegando al postre, podríamos combinar con dulces, como tortas, chocolates o frutas. La combinación más perfecta sería con espumantes semi secos, dulces o vinos dulces naturales.
Esto sería brevemente lo que te podrá ayudar un poco a la hora de elegir el vino perfecto para los platos gastronómicos que tenés en mente.
¿Cuáles son tus combinaciones favoritas?
Fuente: Vix, 2009, winegrapesnews.